Son muchos los empresarios que a menudo nos consultan si su negocio podría tener posibilidades de éxito en Internet. Nosotros siempre decimos que sí, pero con el proyecto adecuado. El abanico de sectores es muy amplio y también lo es el número modelos de negocio. A la hora de plantearnos nuestra presencia en Internet, debemos realizar un acto de reflexión y autoanálisis, identificando cuál es exactamente nuestra situación actual y cuales nuestros objetivos.
Diseñar un proyecto de presencia en Internet implica muchas cosas a tener en cuenta, algunas de las cuales han de evaluarse antes de tirar una sola línea de código. Veamos de forma resumida algunas de las preguntas que debemos contestarnos:
- ¿ Tenemos definido y asumido nuestro modelo de negocio ? (productos, servicios, proyectos, etc)
- ¿ Está nuestro cliente objetivo perfectamente identificado ? (empresas, consumidores, colectivos, etc)
- ¿ Dedicamos de forma habitual parte de nuestros recursos a la captación de nuevos clientes ? (mailings, telemarketing, segmentaciones, etc)
- ¿ Tenemos capacidad para retener a esos clientes en el tiempo ?
- ¿ Podríamos llegar a vender on-line ?
- ¿ Seríamos más competitivos que el resto en algún aspecto ?
Todas las preguntas anteriores deberían tener respuesta clara antes de iniciar nuestro proyecto web. Independientemente de que podamos o no vender on-line, deberíamos asumir que una web de empresa, una vez publicada, requiere de nuestra atención y seguimiento continuos.
Debemos tener claro quienes somos, a que nos dedicamos y a quien podemos resultar interesantes. Ir a por ello con decisión y después tener claro que deberemos tener una continuidad en el esfuerzo y sobre todo, ser proactivos.
Finalmente decir que siempre tendremos mayores garantías de éxito si buscamos un elemento que nos diferencie de la competencia, algo que nos distinga claramente y represente una ventaja. Internet es un medio único para esto y las posibilidades las iremos viendo en futuros posts.
Diseñar un proyecto de presencia en Internet implica muchas cosas a tener en cuenta, algunas de las cuales han de evaluarse antes de tirar una sola línea de código. Veamos de forma resumida algunas de las preguntas que debemos contestarnos:
- ¿ Tenemos definido y asumido nuestro modelo de negocio ? (productos, servicios, proyectos, etc)
- ¿ Está nuestro cliente objetivo perfectamente identificado ? (empresas, consumidores, colectivos, etc)
- ¿ Dedicamos de forma habitual parte de nuestros recursos a la captación de nuevos clientes ? (mailings, telemarketing, segmentaciones, etc)
- ¿ Tenemos capacidad para retener a esos clientes en el tiempo ?
- ¿ Podríamos llegar a vender on-line ?
- ¿ Seríamos más competitivos que el resto en algún aspecto ?
Todas las preguntas anteriores deberían tener respuesta clara antes de iniciar nuestro proyecto web. Independientemente de que podamos o no vender on-line, deberíamos asumir que una web de empresa, una vez publicada, requiere de nuestra atención y seguimiento continuos.
Debemos tener claro quienes somos, a que nos dedicamos y a quien podemos resultar interesantes. Ir a por ello con decisión y después tener claro que deberemos tener una continuidad en el esfuerzo y sobre todo, ser proactivos.
Finalmente decir que siempre tendremos mayores garantías de éxito si buscamos un elemento que nos diferencie de la competencia, algo que nos distinga claramente y represente una ventaja. Internet es un medio único para esto y las posibilidades las iremos viendo en futuros posts.
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